No se lo merece. Su comportamiento siempre ha sido ejemplar, con esa cara de niño bueno que nunca ha roto un plato, su sonrisa angelical, incluso cierta ingenuidad en sus gestos fruto de su edad. Cuatro años en el primer equipo, sus más de 800 goles en las categorías inferiores, ser el máximo realizador de la cantera… no ha servido de mucho: Le toca correr en solitario en Bellpuig.
Tras una corta vida entregado al equipo de sus amores, Bojan ha recibido un trato inmerecido. Quizá la mala leche que a veces le ha faltado en el césped, le habría ido bien en esta negociación. Pero manda el Barça y el club ha decidido que primero tocaba fichar a Alexis. Una vez cerrado el chileno, el leridano podría irse. Esta premisa la han repetido hasta la saciedad desde las oficinas del Camp Nou. Y, la verdad, pocos la entienden.¿Por qué no se ha facilitado la marcha de Bojan? En el entorno del jugador se muerden la lengua. No quieren guerra con el club, el Barça continúa siendo la casa del de Linyola. Además saben que yendo a malas, se cerrarían definitivamente la puerta de regreso. Ha tocado tragar y seguir los ritmos del mercado que han impuesto los azulgrana.
En lo deportivo se entiende que le hayan dejado salir. Es una decisión técnica. Y aquí manda -y se ha ganado todo el derecho a decidir- Guardiola. (También Zubi, quién está legitimado por los aciertos del año pasado). El tiempo dirá si ha sido un acierto o un error, si Bojan no servía para el primer equipo o si el de Linyola lo borda en Roma y vuelve con todos los honores. Ya llegará el momento para evaluar. Ahora toca decir adiós. Sin estridencias, pero dejando claro que el Barça no ha estado a la altura. Bojan no se lo merece.
Albert Llimós, diari Sport (21-07-11)